Otra vez sueños inquietantes; helo aquí:
-Le he vendido mi alma al diablo; el diablo es un hermoso personaje sin rostro definido al que llamo “Manu”; del sujeto recuerdo unos ojos claros y una voz profunda, también un erotismo desmedido y profano en el que se sella el pacto que tengo con él; al final llego a la conclusión de que no es el demonio, que es sólo un hombre, ignoro nuestro pacto y huyo-. Que rara está mi cabeza los últimos días, es un caudal de imágenes borrosas y erráticas, siento que me estoy enviando mensajes desde el inconciente, pero no puedo descifrarlos, no lo logro.
El fin de semana transcurrió con calma. La madre inexistente y yo guardamos silencio; me sorprende el alivio que ha producido en mí el no tener que mantener una conversación con ella. Tolero más su presencia de este modo. Al parecer encontré la fórmula para llegar a graduarme en paz.
El Señor Sorpresa hizo dos llamadas recordando entregar el libro a la biblioteca. La charla fue sólo eso: “favor entregar libro, ¿cuántos días de retrazo tiene la entrega?, tengo una multa de $27.000, no, no sólo son de ese libro, si tranquila, me paga después; no, no se preocupe, tranquila, yo debo más libros, bla, bla…” A eso se reducen nuestros asuntos pendientes; una fría manera de recordarme que existe.
Ayer lo entregué. Aun quedan los $5.000 que le debo; se los entregaré en cuanto lo vea, y presiento que ahí habrán concluido del todo nuestras comunicaciones. Ya no tendrá motivos para cruzarse conmigo… mmmm, otra vez la sensación de alivio y tristeza y asco y amor y dolor y rabia, ¡Six pack emocional! ¡Diga Adiós y lléveselas gratis! ¡Cómodamente se instalarán entre su pecho y espalda por tiempo indefinido! ¿Garantía? Ahh, la que quiera (mientras no vaya a terapia….).
Ohh, mi humor, no puede ser más sombrío, sonrisita cínica, jejeje.
En cuanto a la tesis, el sábado concluyeron las observaciones; lo que me regalará unas horas más de descanso y más holgura en el manejo del tiempo. Está perfecto.
Y bueno, aparte de esas ocupaciones ayudé a algunos compañeros del trabajo dejándome tomar foticos con teléfonos que próximamente circularán en una revista; que cómico eso, yo de Pseudo-modelo… nada que ver conmigo; pero todo sea por la causa de los fotógrafos. Pediré una copia de la revista, sólo para tener un motivo más para reírme de mí.
-Le he vendido mi alma al diablo; el diablo es un hermoso personaje sin rostro definido al que llamo “Manu”; del sujeto recuerdo unos ojos claros y una voz profunda, también un erotismo desmedido y profano en el que se sella el pacto que tengo con él; al final llego a la conclusión de que no es el demonio, que es sólo un hombre, ignoro nuestro pacto y huyo-. Que rara está mi cabeza los últimos días, es un caudal de imágenes borrosas y erráticas, siento que me estoy enviando mensajes desde el inconciente, pero no puedo descifrarlos, no lo logro.
El fin de semana transcurrió con calma. La madre inexistente y yo guardamos silencio; me sorprende el alivio que ha producido en mí el no tener que mantener una conversación con ella. Tolero más su presencia de este modo. Al parecer encontré la fórmula para llegar a graduarme en paz.
El Señor Sorpresa hizo dos llamadas recordando entregar el libro a la biblioteca. La charla fue sólo eso: “favor entregar libro, ¿cuántos días de retrazo tiene la entrega?, tengo una multa de $27.000, no, no sólo son de ese libro, si tranquila, me paga después; no, no se preocupe, tranquila, yo debo más libros, bla, bla…” A eso se reducen nuestros asuntos pendientes; una fría manera de recordarme que existe.
Ayer lo entregué. Aun quedan los $5.000 que le debo; se los entregaré en cuanto lo vea, y presiento que ahí habrán concluido del todo nuestras comunicaciones. Ya no tendrá motivos para cruzarse conmigo… mmmm, otra vez la sensación de alivio y tristeza y asco y amor y dolor y rabia, ¡Six pack emocional! ¡Diga Adiós y lléveselas gratis! ¡Cómodamente se instalarán entre su pecho y espalda por tiempo indefinido! ¿Garantía? Ahh, la que quiera (mientras no vaya a terapia….).
Ohh, mi humor, no puede ser más sombrío, sonrisita cínica, jejeje.
En cuanto a la tesis, el sábado concluyeron las observaciones; lo que me regalará unas horas más de descanso y más holgura en el manejo del tiempo. Está perfecto.
Y bueno, aparte de esas ocupaciones ayudé a algunos compañeros del trabajo dejándome tomar foticos con teléfonos que próximamente circularán en una revista; que cómico eso, yo de Pseudo-modelo… nada que ver conmigo; pero todo sea por la causa de los fotógrafos. Pediré una copia de la revista, sólo para tener un motivo más para reírme de mí.
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