Nuevamente perseguidos por la casualidad; yo bajando y usted en subida y miles de chispas en un par de miradas fijas.
La fatalidad nos respira en la nuca; el Señor Sorpresa seguramente la ignora y pretende continuar impasible y paralelo a mí…mientras tanto yo recolecto los signos y sonrío.
Y es que la estela de nuestra historia no me lo va a devolver; eso es seguro… pero si le hará la huida más tediosa, y ese pequeñísimo e ínfimo suceso me restituye y hace mi causa justa.
El Otro lado del mundo lleva en su espalda el gusto por las miradas furtivas y los flirteos cándidos.
Se prohíbe dar un paso en falso; el sigilo es rey.
Es éste el discreto encanto lo imaginado.
La belleza del secreto que se comparte, pero que jamás será contado.
Mmmmmmmmmmmmmm….
La fatalidad nos respira en la nuca; el Señor Sorpresa seguramente la ignora y pretende continuar impasible y paralelo a mí…mientras tanto yo recolecto los signos y sonrío.
Y es que la estela de nuestra historia no me lo va a devolver; eso es seguro… pero si le hará la huida más tediosa, y ese pequeñísimo e ínfimo suceso me restituye y hace mi causa justa.
El Otro lado del mundo lleva en su espalda el gusto por las miradas furtivas y los flirteos cándidos.
Se prohíbe dar un paso en falso; el sigilo es rey.
Es éste el discreto encanto lo imaginado.
La belleza del secreto que se comparte, pero que jamás será contado.
Mmmmmmmmmmmmmm….
Detrás de todo lo exquisito hay algo trágico.
El Retrato de Dorian Gray, Oscar Wilde
1 comment:
yo pienso que estás loca, y por lo visto en la historia de la humanidad, eso es un cumplido. Ojalá nunca salgás de esa particular cabeza.
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